El último día de festival quizás era
el primero de los que apetecía entrar antes. Elliott Brood empezaba a las 18.20
y aunque su country canadiense fuese de la letra pequeña del cartel, canciones
como “Cadillac Dust” y “Write It All Down For You” daban ganas de escucharlos.
Band of Horses actuaba en el
segundo escenario, decisión motivada seguramente para reservar el escenario BBK
para uno de los reclamos de este año. The Lumineers, quienes aportaron diversidad
de público al festival. Un concierto en el que podrías ser recompensando si estabas
en el mogollón cuando los artistas tocaron entre el publico un par de temas. Antes
igual de emotivo fue el estandarte de Band of Horses, The Funeral.
Fotografía de Nuria SL
Los principales cabezas de cartel
junto con Franz Ferdinand, The Black Keys, hicieron uno de los mejores
conciertos del festival. La guitarra y la batería poco se detenían entre temazo
y temazo, ya fuese del nuevo disco o de cualquiera de los anteriores.
Fotografía de Nuria SL
De alguna manera se extendió el rumor de que MGMT ya no tocaban “Kids” en sus directos. Algo que repartió un poco de público hacia la carpa con La Maravillosa Orquestra del Alcohol. Quienes se quedaron en el escenario Heineken vieron unos MGMT bastante animados a pesar del momento de más bajas temperaturas en el primer día sin lluvias. Sonó “Kids” y sonó muy bien, entremezclando otro tema para acabar con sus notas más famosas otra vez.
Después del concierto de La M. O.
D. A. el artista ‘por confirmar’ de 3 a 4.20 era Eme DJ. Siempre es de
agradecer un DJ a esas horas que no se complique y pinche éxitos que se puedan
cantar. Se empalmó rápido con un gran conocido de los asiduos al Apolo del
Paral·lel barcelonés, John Talabot.